miércoles, 25 de marzo de 2015

Como perforar cerámica y no morir en el intento



Tal vez se pregunten cuál es la utilidad de este post, acaso uno está perforando vasijas de cerámica a cada rato? para que querría uno andar agujerando artefactos que por algún motivo carecen de tal orificio...bueno lo cierto es que para los amantes de la jardinería y que además nos gusta lucir nuestras plantas en lindos cuencos, el tema puede cobrar gran relevancia...bueno no sé si tanto pero les aseguro que en tal caso al menos les resultará de utilidad. En resumen, esta tarea me permite combinar algunos placeres: jardinería, reciclaje y decoración


Me encantan las macetas de cerámica, su textura, sus colores, su estética en general, si por mi fuera tendría cada una de mis plantas, o gran parte, en ellas; tengo varias que me regaló mi mamá que las hace en un taller-cooperativa al que concurre en el pueblo en el que vive y algunas que he comprado, lo cierto es que en las casas del ramo son bastante costosas de modo que este ha sido un excelente método para lograr unas bonitas y originales macetas de cerámica a bajo costo.

Antes que piensen que estoy rompiendo la loza y tazas de mi cocina, les aclaro que no, la idea no es esa sino en aprovechar aquellos recipientes que se nos han roto en casa y que ya no podemos darles el mismo uso porque se astillaron, cascaron,etc o conseguirlos directamente en locales que vendan productos con averías u outlets  a muy bajo coso (ej. en uno de estos comercios he conseguido 3 tazas por $ 19 eso es 0.76 dólares y pequeños bowls a $39)




Si tienen posibilidad de seleccionar es preferible descartar aquellos que están astillados que si bien pueden sortear el problema existen más posibilidades que la vibración del taladro haga expandir la fractura y el recipiente termine por romperse. En las primeras piezas que perforé no tomé las precauciones que acá detallo y si bien algunas sobrevivieron también tuve algunas bajas, hasta que un compañero de trabajo de mi novio le pasó estos consejos, los puse en práctica y eureka! Ahora los comparto con ustedes y a taladrar!!!

Tips

- Utilizar  una mecha para taladro con punta de widia, No. 6 u 8 estará bien


- Si el recipiente está astillado es una buena técnica encintar la zona dañada por dentro y por fuera.







- Llenar el recipiente con arena y darle la vuelta colocándolo dentro de un recipiente más grande y rellenarlo con arena dejando sólo a la vista la base de la vasija que será perforada. 




- Cuando tengan marcada la cerámica pueden ponerle percutor al taladro ya que esto facilitará la tarea


Recuerden que dependiendo de la calidad y el grosor de la cerámica será el trabajo que de agujerearlo, a mayor calidad mayor tiempo de trabajo, no se asusten si están 10 minutos taladrando, me pasó con algunas cerámicas muy duras. 
Hecho el trabajo, a plantar!!!




jueves, 19 de marzo de 2015

Disfrutar de no hacer nada: Vacaciones!


Siempre he sido de esas personas que les cuesta estar en su casa sin hacer nada, entiéndase por tal mirar la tele, una peli, quedarme tirada en la cama o leer un libro, no es que no lo disfrute pero no puedo evitar cierta sensación de culpa, de tiempo que se escabulle, necesito hacer cosas para sentirme productiva y al mismo tiempo me siento algo tonta por tener esos sentimientos que no puedo evitar, contradicciones de la vida.



Sin embargo en las vacaciones esa máxima desaparece, se vuelven tan disfrutables las siestas las horas sentada mirando el mar y la lectura de un libro que uno quisiera detener el tiempo y prolongarlas hasta el infinito y es ahí cuando uno piensa si tiene lógica este sistema en el que trabajamos todo un año para descansar y disfrutar veinte días o si la clave estará en amar y disfrutar lo que hacemos cada día y trabajar para convertir esa idea en realidad, cada vez más tiendo a inclinarme por esto último.



Foto tomada desde el faro de Cabo Polonio, Rocha, Uruguay.

Me suele pasar que en la licencia así como dejo de hacer algunas cosas tales como trabajar o ir al gimnasio aprovecho para hacer otras, por ejemplo terminar libros que fueron quedando a medio leer durante el año, esta vez le tocó a Caminos Invisibles de Juan Pablo Villarino y Laura Lazzarino dos bloggers viajeros que relatan sus aventuras en una travesía de 36.000 kilómetros y 545 días de viaje por Sudamérica, profesando el autostop, el couchsurfing y el contacto con los lugareños, brindando historias inspiradoras, emocionantes y divertidas.
A quien le interese conocer algo más de los autores les dejo el link a sus blogs, donde también encontrarán información para adquirir el libro: http://www.acrobatadelcamino.com y http://losviajesdenena.com

"' Nosostros nos resistimos al cambio', me dijo Américo mientras preparaba el café que habíamos ordenado. En el viejo bodegón que atendía habíamos buscado refugio de un chaparrón súbito. Era un antro con billares y ventiladores descalabrados que hedía a madera y encierro, una tasca oscura consagrada a los vinilos antiguos en donde a nadie se le habría ocurrido pedir una Pepsi. Américo recetaba café a quien quisiera olvidarse del tiempo y whiskey si de relegarse a uno mismo se trataba. La misma màquina cafetera Vittoria dispensaba, con chirridos de locomotora, el insomnio azabache desde que el bisabuelo de Américo la había comprado en 1908. Había sido transportada desde Italia a vapor y hasta Salento hasta lomo de mula. Para no desentonar, un grupo de parroquianos jugaba al sapo, ejecutando de memoria un ritual cuyo afán era no despertar con novedades a los relojes de la historia. Las directrices de ese rito de contención venían dadas por una melodía que había comenzado a manar de los gramófonos de las cantinas colombianas en los años treinta, y que sonaba esa tarde en el bar. Su mayor exponente falleció en un accidente aéreo en Medellín en 1935. La tragedia no hizo más que preparar su devoción en una tierra donde ya era admirado. Ese mito se llama Carlos Gardel y esa música es el tango." Fragmento del libro relatando sus vivencias a través de eje cafetero en Salento, Colombia.


Y para despuntar el vicio este es otro de los que me llevé en la valija, aunque aún me queda mucho jugo para sacarle, ya lo verán en futuros post!


martes, 17 de marzo de 2015

Tarta de coco y zanahoria


Esta tarta ha sido un reciente y grato descubrimiento gastronómico, resulta muy fácil de realizar y el resultado es exquisito. 


Me gusta mucho la repostería, disfruto el proceso y por supuesto los resultados, muchas veces se me antoja algo que probé o vi alguna receta y ya me lo programo para que al momento de ponerme a trabajar no falte nada...esta tarta no es el caso ya que nació de la necesidad de usar lo que tenía en la heladera, para empezar el coco rallado que quedó luego de hacer leche de coco (ya tenía una semana guardado y no quería que se pusiera feo) Busqué recetas en internet que llevaran coco y encontré miles, entre ellas muchos de tortas con coco y zanahoria, así que pensé que si habían tantas recetas similares la combinación debía ser muy buena, leí varias de ellas pero no me convenció ninguna, entre otras cosas porque la mayoría de ellas eran hechas con bizcochos o galletas y mis planes era hacer algo rico con lo que tenía a mano y en casa. 

La receta que les dejo esta inspirada en recetas que encontré en la web pero no se ajusta a ninguna ya que adapté ingredientes y cantidades, el resultado: una tarta suave y húmeda, ideal para acompañar un té o algún jugo natural.





Ingredientes:200 grs. de zanahoria rallada150 grs. de coco rallado200 grs. de azúcar rubia3 cucharadas de miel100 grs. de almendras Queso cremaAzúcar impalpable


Elaboración:
Mezclar la zanahoria rallada fina con el coco rallado. En la receta usé 150 gramos pero hay que tener en cuenta que era coco del que previamente se había extraído la leche de coco por lo tanto estaba un tanto seco y con menos sabor, si usan coco rallado "nuevo"  pueden usar menos, estimo que unos cien  gramos será suficiente. Continúan revolviendo y agregan paulatinamente el azúcar, la miel y las almendras picadas. 
Colocan en una asadera de 30 cm. de diámetro y llevan al horno a 180 grados hasta que esté dorado (45 minutos)
Para el frosting de queso: mezclar 250 gramos de queso crema con azúcar impalpable y cubrir al tarta con esta preparación.

Ideal servir directo desde la heladera.